No.
Ya no más de esto, de lo otro
de lo mismo.
De lo inmutable, de lo intrascendente, de lo mortal;
de lo meramente inalcanzable, polarizado
y tóxico...
Ya no más.
No más juegos calcáreos de felicidad,
de orgullo,
de fingidas esperanzas.
Yo quiero Amor, poemas,
versos completos...
No mamadas.